Tu marca personal como médico tiene los mismos atributos y necesidades de gestión que una marca comercial:
- es marca y tiene por objeto identificar a su propietario entre el resto de actores sociales, proyectando el/los valor/es diferencial/es que diferencian a la persona.
- es personal (y ahí reside su diferencia fundamental con la marca tradicional), se refiere a una persona y no a una organización o empresa comercial.
- tiene que ser gestionada para influir positivamente en ella y poderla “controlar” en alguna medida.
La marca personal
La forma en que nos relacionamos con otros colegas profesionales, con nuestros clientes, proveedores y con la sociedad en general crea nuestra propia “marca personal”: el conjunto de atributos que nos identifican y diferencian del resto de personas, que nos califican en nuestro entorno profesional y que puede influir en que los clientes seleccionen o no nuestra oferta de servicios.
Como todas nuestras interacciones personales y profesionales generan percepciones en nuestro entorno, ese conjunto de percepciones da lugar a nuestra marca. Por ello, cuando hablamos de crear o gestionar una marca personal de lo que estamos hablando es crear en los demás la percepción que deseamos que tengan de nosotros como personas y como profesionales.
¿Cómo debes construir tu marca personal?
- Identifica los valores, los talentos profesionales, las capacidades y actitudes que mejor te identifican y que serán la base que fundamentarás tu estrategia de comunicación.
- Define tus objetivos: qué imagen personal deseas que se perciba de ti, qué comentarios deseas recibir sobre tu capacitación profesional, cómo deseas que te veamos los demás. Por ejemplo:ser un referente en traumatología pediátrica, aportar a la sociedad tu experiencia en tu especialidad médica poniéndola al alcance de cualquier persona y profesional médico gracias a internet, potenciar la investigación en tu especialidad médica, conseguir que se desarrolle tu consulta privada, etc.
- Desarrolla contenidos de calidad: deben ser útiles para tus visitantes y que te ayuden a conseguir el objetivo de marca personal que te has fijado: que tus pacientes sientan que accediendo a tu web y leyendo los tratamientos que propones pueden obtener una mejora real en su calidad de vida, que los profesionales que ayudas a formar en los eventos que organizas te idenfiquen como referente, etc. Selecciona lo que dices, modulando el registro que más se alinee con tus objetivos.
- Márcate un plan de acción y síguelo: difundir los contenidos útiles que has preparado requiere seleccionar dónde los publicas. Hay multitud de medios online y offline que puedes emplear para crear y gestionar tu marca: eventos profesionales, revistas especializadas (digitales y físicas), tu página web, publicaciones profesionales, participación en programas de radio y TV, participación en congresos, ponencias, difusión de tus posts en redes sociales… Define una selección de medios y aplícate. Selecciona donde publicas tus contenidos, dónde participas...
- Valora qué efectos tiene la gestión de tu marca: gestionar tu marca es un esfuerzo adicional en tiempo y recursos, y debes valorar qué efectos tiene en tu vida profesional. Revisa periódicamente las visitas que recibes en tu web, qué contenidos interesan más (para desarrollar noticias sobre dichos capítulos), qué comentarios recibes en las redes sociales (número de “me gusta” que recibes en tu página de facebook, cuántos retweets generas… y pregunta a tus pacientes cómo te han localizado porque la afluencia de nuevos pacientes definirá el éxito de tu estrategia.
Y recuerda dos pautas imprescindibles:
- Sé original: no imites a otros y crea tus propios contenidos adaptándolos a tu público objetivo, esos pacientes que deseas visitar en tu consulta y que deben tener confianza en tus servicios.
- Revisa tu presencia en internet: porque no todo lo que hagas funcionará igual y debes poder aprender de lo que no funciona e invertir tu tiempo en aquellas acciones que sí aportan valor a tu marca personal.